
La herramienta de transformación más poderosa que existe es la educación. A través de ella pueden lograrse cambios que, sin su concurso, serían imposibles. Sin embargo, ningún cambio, ninguna transformación es posible sin la convicción, sin el liderazgo y, en especial, sin el ejemplo de aquellos que están genuinamente comprometidos con una causa determinada.
“Lo que hagas, cuenta, aporta. Aunque a veces creas que es muy poco, que no es suficiente”. Con esta premisa, ConBiVe (Conservación de la Biodiversidad Venezolana) crea conciencia entre los jóvenes venezolanos y comanda acciones efectivas en defensa del medioambiente y la conservación del mar. Esta asociación sin fines de lucro fue fundada en 2010.
“Nos gusta definirnos como una plataforma de participación ciudadana para el desarrollo sostenible de nuestro país”, afirman. Una de las razones por las cuales el medioambiente, la naturaleza y los recursos básicos están en riesgo es porque la mayoría de las personas cree que su cuidado, conservación y sostenimiento es una responsabilidad exclusiva de los gobiernos.
Y, sí, en teoría así es. Sin embargo, sabemos también que en la práctica, a la hora de ejecutar acciones que sean efectiva, de destinar recursos que promuevan acciones de impacto y, sobre todo, de liderar e inspirar con el ejemplo, los gobiernos se rajan. Por esto, precisamente por esto, es tan importante que haya organizaciones privadas que se atrevan a tomar el testigo.
“Queremos conectar con cada persona y mostrarle lo que puede hacer para vivir de forma más sostenible y amigable con el ambiente desde casa, la oficina o la universidad”. En este punto es que entra en juego la educación, esa poderosa herramienta de transformación. Porque, y esto es algo que la mayoría de las personas desconoce, desde la ciudad también se protege la naturaleza.
¿Cómo? A través de las pequeñas prácticas como el reciclaje, como la no utilización de envases plásticos de un solo uso o de bolsas plásticas, como evitar botar en las calles elementos contaminantes que eventualmente puedan llegar al mar, a las fuentes hídricas. Pequeñas acciones de gran impacto, pequeñas acciones que todos podemos hacer, que todos debemos hacer.
“Nuestro propósito es conectar a las personas con las con lo que pueden hacer para vivir de una forma más sostenible y aportar, desde sus actividades cotidianas, para contribuir al desarrollo sostenible de Venezuela”. El mensaje de fondo es muy claro: el planeta no es de los gobiernos, no les pertenece a ellos; es un privilegio de todos y cada uno de los seres humanos.
Por eso, entonces, es importante que cada persona, cada ciudadano, sin importar dónde viva, qué edad tenga o a qué se dedique, sea consciente del impacto de sus acciones, de cómo estas pueden afectar el medioambiente. “Nos inspira la idea de hacer conciencia de la importancia de la naturaleza y la participación ciudadana para la recuperación económica y el desarrollo sostenible de Venezuela”.

Algunas de las acciones que ConBiVe realiza son las siguientes:
1.- Sensibiliza, concientiza, conecta y educa para la conservación y sostenibilidad
2.- Desarrolla investigaciones y realiza el monitoreo de elementos de la biodiversidad y ecosistemas para promover el desarrollo científico y tecnológico del país
3.- Impulsa el turismo responsable y ecoturismo como herramienta para la conservación de la naturaleza y el desarrollo socioeconómico del país
4.- Favorece la conservación y el manejo sostenible en áreas naturales protegidas, zonas rurales y urbanas
5.- Adelanta programas de manejo y conservación de hábitats y especies en vida silvestre o en cautiverio
6.- Coopera con personas naturales o jurídicas, públicas o privadas, que desplieguen esfuerzos enfocados en la conservación de la naturaleza
“Lo más satisfactorio que hemos conseguido durante este tiempo es la construcción de una red de aliados comprometidos con los objetivos de la organización, la protección de las playas y la creación de oportunidades de desarrollo sostenible a través de la conservación”. Aunque suene a frase de cajón, es la realización de aquella vieja premisa de “la unión hace la fuerza”.
Por supuesto, en ConBiVe saben que, si bien es mucho lo que se ha logrado, también es mucho lo que resta por realizar. “Nuestra intención es que la mayor cantidad de personas posible tome conciencia sobre el impacto que sus acciones tienen en el ambiente, para bien o para mal”. En esta labor, se apalancan en las redes sociales para que su mensaje llegue a más personas.
Por supuesto, no ha sido una tarea fácil, porque los obstáculos aparecen por doquier. “Llegar a los lugares más apartados es complicado, así como la permanencia y la seguridad en aquellos sitios en los que realizamos nuestra labor”. Aunque sea difícil de creer, los miembros de ConBiVe no siempre son bienvenidos, hay comunidades en las que su presencia genera desconfianza.
Por fortuna, hay otras en las que no solo son bien acogidos, sino también en las que su mensaje resuena. “Buscamos establecer una relación legítima con las comunidades en las que trabajamos y tenemos la satisfacción de conseguirlo muchas veces. Por ejemplo, Gran Roque, el pueblo del Parque Nacional Archipiélago Los Roques, nos adoptó para realizar nuestra labor”.
La conexión con la comunidad de Los Roques es tan fuerte, que se estableció un Team ConBiVe, compuesto por jóvenes que están involucrados con la conservación de aquel lugar. Pequeñas victorias, dirán algunos, pero la verdad es que son grandes acciones que a largo plazo generan un impacto positivo. Es una semilla que más adelante dará sus frutos.
En cualquier país de Latinoamérica, es común escuchar críticas a las nuevas generaciones, a las que se las acusa de no preocuparse de asuntos que son verdaderamente importantes. La labor de ConBiVe, sin embargo, demuestran que no es así: lo que falta, quizás, es información, educación para que estos jóvenes vuelquen su pasión en acciones positivas, constructivas.
Venezuela es uno de los países con mayor biodiversidad en el mundo, un privilegio que muchos desconocen y pocos valoran. Por eso, precisamente por eso, esfuerzos como los que realiza ConBiVe son tan importantes. De lejos, quizás, parecen intentos aislados sin efecto, pero dado que están respaldados por la educación y la acción efectiva, generan un impacto positivo.